El estado mental durante estos tiempos

Durante el último año y medio, las enfermedades mentales de forma lenta pero segura ya no se consideran un "tabú". Aunque todavía es menospreciado en la comunidad Latinx. A lo largo de la pandemia, la gente ha pasado por pérdidas y ha tenido que lidiar con muchas emociones difíciles. Para empeorar las cosas, el clima político no ha sido el mejor. Con la pérdida de George Floyd y las protestas de las vidas negras, nada más que odio ha rodeado a la gente de color.

En los hogares latinos, durante este tiempo algunas personas se vieron obligadas a regresar a un ambiente tóxico. Es bien sabido que algunos pueden ver la enfermedad mental como "pereza" o como "estar loco", cuando ese nunca ha sido el caso. Por muy triste que sea decirlo debido a la pandemia, la gente se vio obligada a darse cuenta de que la enfermedad mental es real. En el pico de la pandemia, casi todo el mundo en un momento dado pasó por la depresión cuando su vida cotidiana "normal" se detuvo.

Según cidrip.umn.edu, las tasas de depresión se han triplicado en los adultos estadounidenses en todos los grupos demográficos debido a la pandemia de COVID-19. Con los hogares latinos específicamente, a veces es difícil hacer cumplir la idea de que la depresión no es pereza. Sin embargo, para detener eso, las comunidades latinas tienen que hablar en su nombre. Si hay una voz para la depresión, la ansiedad por cualquier tipo de enfermedad mental en la comunidad latina, entonces la idea de que las personas con enfermedades mentales son “perezosas” puede descartarse.

La gente de la comunidad lo menosprecia, ya que nunca se les informó realmente sobre lo que realmente es la enfermedad mental. Dado que no se puede resolver con la medicina típica, algunas personas en la comunidad ven que no hay razón para estar deprimidas.

Las familias vienen de México sin saber nada más que trabajar duro y vienen a los Estados Unidos en busca de una “vida mejor”, aquí es donde se inicia la mayor parte del tabú.

En parte, el machismo entra en juego cuando se trata de este tipo de mentalidad, y eso se debe a ver la vulnerabilidad como una debilidad. Las familias Latinx, por supuesto, quieren lo mejor para sus hijos pero, como saben que el trabajar duro ayuda a tener una vida mejor, lo ven como que sus hijos deben ser felices y no tienen ninguna razón para estar deprimidos.

Este no es el caso en absoluto, los ciudadanos de los Estados Unidos también enfrentan mucho más en la sociedad actual que está llena de odio. Una persona de color podría tener todo lo que necesita en la vida, pero debido al odio que siente que hay hacia su cultura e incluso hacia sus seres queridos de diferentes culturas, es difícil no estar deprimido o ansioso.

Stephanie Hinojosa de Project OCEAN, un programa de la Universidad Estatal de California, Long Beach dedicada a la promoción de la salud mental, ha pasado por esto como estudiante de primera generación en CSULB. Hinojosa lo ha vivido con los miembros de su familia y la afectó en su crecimiento. 

“Para mí, era más como si no pudiera hablar con la gente porque estaba muy insegura acerca de mí misma y de mi identidad. Como mujer gay y persona de color, una vez que le dije a mi madre, vi que nuestra relación cambiaba y progresaba y sentí que podía abrirme más con ella”, dijo Hinojosa. 

Le tomó tiempo educar a los miembros de su familia para que pudieran entenderla, incluso ahora todavía tiene que continuar educándolos, pero sabe que así es como se producirá el cambio.

Hinojosa también dijo que el lenguaje del amor puede ser un papel muy importante en cómo se brinda el cuidado y el amor, si la percepción del amor de una persona es diferente a la de los demás, puede interferir con la forma en que se le la ayuda.

Nidia Moran Canales es consejera clínica con Servicios de Consejería y Psicología o CAPS en CSULB, y ha tenido una buena cantidad de experiencias en respecto al estigma cuando se trata de enfermedades mentales.

Canales habló sobre cómo todos están pasando por cosas diferentes y las procesan de manera diferente. “Cada cabeza es un mundo”, dijo Canales. Ella reconoce que cada estudiante tendrá diferentes necesidades para estar "bien" y recibir ayuda, y se alegra de que la universidad proporcione recursos.

Canales dijo que mientras los estudiantes continúen brindando atención a los recursos del campus, los estudiantes recibirán la ayuda que necesitan. “Es importante que los estudiantes se vean a sí mismos en estudiantes y profesores, y que Cal State Long Beach continúe haciendo un esfuerzo por la representación”, dijo Canales.

Si los alumnos se ven a sí mismos como mentores, la conciencia se irá difundiendo y poco a poco puede haber una gran mejora en los alumnos.

Para obtener más información sobre los recursos ofrecidos en la Universidad Estatal de California, Long Beach, visite su sitio web: https://www.csulb.edu/student-affairs/counseling-and-psychological-services